A veces un código terrible realmente ayuda

Vamos a repetir esto: escribir código es como crear una obra de arte. Puede no parecerlo al principio, pero con el tiempo empezarás a ver el arte dentro de las líneas.

Empezarás a notar cómo puedes poner tu toque personal en una pieza de código. Por eso todos queremos que nuestro código tenga el mejor aspecto posible.

Nunca intentarías vender una canción inacabada o un cuadro a medio terminar. Tu código también tiene que estar en su punto antes de llamarlo “hecho” (lo que no significa que sea perfecto de ninguna manera).

Sin embargo, llevar el código hasta el punto de que esté “hecho” no es lo mismo que escribirlo por primera vez. La primera versión de tu solución no tiene por qué ser bonita. De hecho, puede, y a veces debe, ser lo más fea posible.

Debes pensar en la primera versión de tu código como la versión escrita del modelo mental que utilizas para resolver el problema. Como todo buen modelo mental, será de alto nivel y genérico, por lo que tu primera versión de código no dará el mejor resultado. Pero eso está bien: debes pensar en él como una forma inicial en arcilla.

Todavía no tiene la forma correcta, y no parece del todo bien, pero con algo de esfuerzo puedes conseguir que tenga el aspecto que deseas.

El código puede ser como la arcilla: puede llevar tiempo conseguirlo bien, y tratar de hacerlo en la primera vez sólo hará que caigas en una de las trampas cubiertas en este capítulo (como la optimización temprana o la sobreingeniería).

“Todavía no tiene la forma correcta, pero con algo de esfuerzo puedes conseguir el aspecto deseado”

Mi consejo para cualquier desarrollador nuevo que empiece a ensuciarse las manos con código es que acepte la terrible solución del código. Esto le dará una versión de trabajo que luego puede esculpir en su forma final.

Y para aclarar, estas cosas malas del código son esencialmente malas prácticas que usamos mientras escribimos nuestro código y que eventualmente necesitamos eliminar.

Debes saber que, aunque son malas y tendrán que ser eliminadas en la medida de lo posible de la versión final de tu código, se te permite usarlas durante tus primeras versiones. En este punto, el único que lee y mantiene tu código eres tú, así que no te afectarán esos detalles, al menos por el momento.

Los detalles de código no son el único problema que se te permite introducir en tu primera solución:

¿Bucles anidados? Claro, añade tantos y tan anidados como necesites ahora mismo.

¿Recursión? Claro, ¿por qué no? ¿A quién le va a importar la pila en este momento?

¿Estás duplicando código por todas partes? Fantástico.

¿Ves el patrón? Estas son cosas que no quieres en tu versión final, si puedes evitarlas; causarán problemas de rendimiento y de memoria, y harán que tu código sea difícil de mantener. Sin embargo, estás haciendo el trabajo – esta versión fea y terrible de tu código resuelve su problema. Has ganado. Has resuelto el rompecabezas.

Una vez hecho esto, se te permite (y honestamente, se te anima) para hacer que se vea mejor. En ese momento, puedes empezar a optimizar y eliminar esas secciones problemáticas. Es entonces cuando te centras en la gente que lee tu código y te olvidas de las máquinas por un tiempo. Límpialo, como se dice.

Conclusiones

Al final de cuentas, desarrollar código no es una tarea de un día, tómate tu tiempo y continúa aprendiendo, durante la marcha encontrarás que existen maneras más eficientes de resolver un problema. Te invito a conocer a profundidad nuestro contenido y también la oportunidad de continuar desarrollándote con Metaphorce.mx

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Síntesis: GHE

Source: XOR / Medium